4 Años han pasado desde la primera vez que decidí escribir por acá, el tiempo vuela, la vida se mueve, no se detiene y suceden muchas cosas. Y aunque escriba menos, y aunque el tiempo pase, no quiero abandonar este espacio del todo…
¿Qué se puede venir? ¿Qué puede pasar en un futuro cercano? ¡Nadie lo sabe! Y de nada sirve pensarlo, porque da igual lo que piense, eso no me ayudará a saber nada de lo que vaya a suceder, de si algo va a salir bien o si va a salir mal, y aunque sea consciente de que esto es así, sigo pensando en ese futuro incierto. ¿Llegará algo bueno? ¿Qué sucederá con mi vida? ¿Pasará algo malo? ¿Me equivocaré en algo? ¡Tengo muchas preguntas dentro de mi!, y a veces, hasta no sé ni como detener ese pensamiento, esa ansiedad que me persigue. Me siento extraño, me siento sin una parte de mi, porque, el hacer las cosas bien y dar todo de ti, no quiere decir que siempre vayan a salir las cosas como querías, ni que vayan a salir del todo bien, y si, lo sé, si las cosas salen mal, por algo suceden, para aprender algo nuevo, para entender que no, la vida no es justa, que nadie dijo nunca que lo fuera y que también existe la posibilidad de que las cosas salgan mal.
Me siento ocupado, pero no con las cosas que me gustaría, no tengo el tiempo que quisiera para leer, para escribir, haciendo cosas que siento no me sirven para nada, me siento estancado, me siento inútil, me siento tonto, me siento frenado. Siento que el tiempo no me alcanza para todo, que no hago lo que me gustaría porque no tengo el tiempo suficiente, que me siento cansado todo el tiempo, que dejo todo a la mitad y que no logro hacer nada bien, todo, por algo que se debe seguir, por hacer las cosas somo se suponen deben ser… Con un presente así, cómo no pensar en un futuro incierto…
La vida nunca se detiene…
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